acusadoramente por si mismos y el resto
Ambos acordaban que el regreso de la sensibilidad pura era paralelo a la herejía por la obsesión estética. Las cosas verdaderamente tristes habían llegado a un punto de exacerbación tal que la historia del patito feo era la versión minimalista (el mito fundacional) que organizaba la tragedia de los muchos millones que tenían ojos, y se encontraban por tanto "observados y revelados como feos acusadoramente por si mismos y el resto".
Pola Oloixarac.
Sem comentários:
Enviar um comentário